Volvieron a negar la transmisión del juicio de lesa humanidad a un medio

Bárbara García, testigo y querellante en el juicio de lesa humanidad Regimiento de Infantería 6 de Mercedes (RIM), calificó como un “capricho” el rechazo del Tribunal Oral Federal N° 2 de Comodoro Py al pedido de la Defensoría del Público para que se transmitan los testimonios de la querella a través del medio de comunicación alternativa La Retaguardia y destacó que es “el único juicio de lesa humanidad” que no tiene permiso para ser difundido.

“Es el único juicio de lesa humanidad que hoy no se está televisando de Comodoro Py. Ya es algo caprichoso, las repuestas (del Tribunal) son menos de un renglón”, explicó en declaraciones a Télam Bárbara García, testigo y querellante de la causa en la que se juzga a los represores que secuestraron y desaparecieron a su mamá, Rocío Martínez Borbolla, y otras 36 víctimas en 1976.

En la última petición, enviada al tribunal el pasado jueves 28, la Defensoría del Público intervino directamente por propia voluntad para exponer los argumentos en favor del medio de comunicación La Retaguardia, que solicitó en dos oportunidades anteriores poder pasar el juicio en su canal.

En el extenso documento que preparó el organismo aludió a la necesidad de que se “revierta la restricción ilegítima”, aludiendo a que contraría el cumplimiento del “acceso a la información pública” y a la “libertad de expresión”.

“La respuesta es siempre la misma: no quieren contaminar a los testigos”, explicó García sobre la respuesta del tribunal constituido por los jueces Javier Feliciano Ríos (presidente), Jorge Luciano Gorini y Rodrigo Giménez Uriburu, que sí permiten la transmisión de las declaraciones de los imputados.

Además de los rechazos a la Retaguardia, y ahora a la Defensoría, el mismo tribunal respondió de igual manera a todos los pedidos previos realizados por la querella, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y la Secretaría de Derechos Humanos, denegados en dos oportunidades.

“Se contradice con todo lo que sucede en todos los demás juicios. Si ellos se basan en que se contamina a los testigos, se contaminarían los testigos de todas las causas de los delitos de lesa humanidad”, replicó García.

Además, detalló que se enteró de la negativa por medio del abogado querellante Pablo Llonto, que fue notificado ayer, y señaló que, hasta la tarde del día de hoy, la Defensora del Público, Miriam Lewin, “no había sido notificada”.

“Con este panorama con tantas trabas y piedras en el camino es todo muy doloroso. Yo siento mucha impotencia. ¿Qué es lo que están cubriendo? ¿Por qué están convalidando el poder de quienes cometieron las peores violaciones a los Derechos Humanos?”, cuestionó García, que presenció cuando tenía nueve años el secuestro de su madre, la militante del PRT-ERP Rocío Ángela Martínez Borbolla.

También aseguró que “son muchas las irregularidades” en la causa y recordó que hace dos semanas se llamó a declarar como testigos a favor de la defensa a los excarapintada Aldo Rico y Heriberto Auel: “Permitir que declare un Aldo Rico habla de que no están las cosas muy bien”, sentenció.

Asimismo, García explicó que con la negativa de los jueces “se benefician” los genocidas porque “quien los vio se quedó con lo que dijeron ellos”, mientras que a la querella y sus testimonios se “nos prohibió el derecho de que se escuche lo que hemos dicho”.

Por otra parte, dijo que durante el juicio “fue muy difícil” para la fiscalía “poder llevar adelante la ronda de preguntas” a los testigos presentados por la defensa “porque a cada rato se oponían”.

Y recordó que el exsubteniente a cargo de la Sección Tiro de la Compañía C del RIM 6, Martín Eduardo Sánchez Zinny, acusado en la causa, la denunció hace dos años y medio por “falso testimonio” y que, mientras espera la respuesta de la Corte Suprema de Justicia, se encuentra en el Programa Nacional de Protección a Testigos.

“No hay antecedentes en juicios de lesa humanidad en donde un genocida acuse a una víctima”, alertó García.

Agregó que “esto supera cualquier ficción” y expresó que “hasta último momento” van a pedir que “se pueda saber toda la verdad” y “no solamente la parte de ellos”, en alusión a los represores.

“Toda mi vida esperé este momento y no me imaginé que fuera así. Necesito que se haga justicia”, concluyó.