¿Qué es ARCA, el nuevo ente que sustituye a la AFIP?

Escuchar

La
AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos)
ha sido disuelta y en su lugar surgirá un nuevo ente fiscal denominado ARCA. El anuncio fue realizado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, en una conferencia de prensa en la tarde del lunes 21 de octubre: “El Gobierno les anuncia muy felizmente que

a partir de hoy la AFIP dejará de existir”.
Este nuevo organismo, cuyo nombre es un acrónimo de Agencia de Regulación y Control Aduanero, tiene como objetivo modernizar y hacer más eficiente la gestión fiscal del país.

Según el comunicado del Gobierno Nacional publicado en la cuenta de X de la Oficina el Presidente, ARCA aspira a ser “un organismo con estructura más simple, más eficiente, menos costosa y menos burocrática”, con vistas a reducir el tamaño del Estado y mejorar la eficiencia en la recaudación y control aduanero. Entre sus objetivos primordiales se encuentran la eliminación de cargos innecesarios y la supresión de los circuitos corruptos.

Florencia Misrahi será la encargada de liderar esta transición, acompañada por Andrés Gerardo Vázquez y José Andrés Velis, quienes asumirán como titulares de la Dirección General Impositiva y la Dirección General de Aduanas, respectivamente.

Adorni anunció que se desvincularán 3,155 empleados contratados irregularmente durante el último gobierno kirchnerista, y se eliminará la Cuenta de Jerarquización, afectando los salarios de los altos cargos, cuyos sueldos serán revisados. Estas medidas buscan reducir en un 45% las autoridades superiores y en un 31% los niveles inferiores, generando así un “ahorro anual de 6,400 millones de pesos”.

LA NACION

En esta histórica reestructuración del aparato estatal, se gestiona un cambio profundo en el enfoque de la fiscalización y aduanas en Argentina, un reflejo del compromiso del gobierno actual con la eficiencia y la transparencia. La controversia se cierne sobre la decisión de desvincular a miles de empleados, lo que ha desatado un intenso debate sobre la herencia de las administraciones anteriores y el balance entre austeridad y servicios públicos. ARCA no solo encarna el cambio de nomenclatura, sino que simboliza una nueva dirección hacia una administración pública que reniega de la burocracia excesiva y apunta a una recaudación más justa y eficiente, un cambio que promete resonar profundamente en el tejido económico del país.