La trágica historia de Rito Irañeta: el ex Puma que perdió la vida junto a su esposa y hermana en Chile
Publicado: 05 / 01 /2025
Rito Irañeta, reconocido ex jugador de Los Pumas y figura destacada del rugby mendocino, falleció este sábado a los 74 años en
un trágico accidente de tránsito en la comuna de Zapallar, Chile.
Junto a él también perdieron la vida su esposa, Andrea Raganto, y su hermana, Maite Irañeta.
En un trágico evento que enluta al deporte argentino, Rito Irañeta, influyente ex integrante de Los Pumas, perdió la vida a raíz de un accidente vial acontecido en la pintoresca comuna de Zapallar, Chile. Las primeras pesquisas señalan que un BMW, comandado por un conductor bajo evidente estado de ebriedad, impactó de costado contra el vehículo donde Irañeta aguardaba diligentemente al margen de la ruta. Este siniestro no solo apagó la vida del reconocido rugbier y de su entrañable esposa Andrea Raganto, sino que también la de su hermana, Maite, quien no resistió las graves heridas tras ser trasladada a un centro asistencial.
La justicia chilena, aplicando a rajatabla la severa Ley Emilia que sanciona con dureza los accidentes causados por el alcohol, mantiene al conductor responsable en un proceso que podría significar varios años tras las rejas. Irañeta, oriundo de Mendoza, dejó una huella imborrable en el rugby al ser convocado por Los Pumas en 1974, escribiendo páginas de gloria en la historia deportiva de la provincia y del país.
En el ámbito del rugby, Irañeta fue pionero entre los mendocinos al debutar con la selección nacional. Con su número de Puma 289, su talento se extendió a memorables giras internacionales, como aquella en Gales en 1976, destacándose por su férrea defensa que resonó junto a nombres ilustres.
Por fuera del rugby, su carpeta profesional abarcó esferas empresariales y bancarias, desempeñando papeles vitales en la economía local durante los años activos en la presidencia del Banco de Previsión Social de Mendoza bajo el gobernador Bordón.
El eco de su pérdida resuena no solo en las canchas que honraron su juego apasionado, sino también en los ejes económicos donde su visión contribuyó al crecimiento de la región. Compañeros y amigos del deporte, entre los cuales resaltó el emocionado adiós de “Chapa” Branca, recordaron su legado de camaradería y habilidad.
El club de sus comienzos, el Mendoza Rugby Club, evocó su figura en un emotivo comunicado, recordando a Irañeta no solo como un ícono deportivo, sino como un pilar humano que irradiaba valores de humildad y dedicación.
La comunidad de Mendoza y Chile se une en este momento de duelo, despidiendo a un hombre que, tanto dentro como fuera del campo, dejó una impronta de integridad y pasión inquebrantable. Mientras la investigación sigue su curso, la vida de Irañeta se celebra en cada memoria compartida por aquellos que lo conocieron y admiraron.