Fernando Gago convoca a una figura de la selección tras asumir como nuevo DT de Boca.

Un nuevo capítulo se abre para Fernando Gago y Boca Juniors. Tras su salida de las Chivas de Guadalajara, el ex mediocampista ha retornado a Buenos Aires para formalizar su entrada triunfal como el nuevo director técnico del club de sus amores, Boca Juniors. La atención del mundo deportivo está centrada en Ezeiza, donde Pintita dirigirá su primer entrenamiento y sostendrá un contacto crucial con los medios de prensa en las próximas horas.

El regreso de Gago al Xeneize no solo es un hito personal para él, sino que también ha desatado una corriente de entusiasmo entre los aficionados. Parte de esa emoción deriva del rumor insistente de que Fernando Gago ya ha puesto su mira en repatriar a Leandro Paredes, quien actualmente juega para la Roma. Se reporta que Gago se ha comunicado con Paredes, sugiriendo un regreso en 2025, un movimiento que parece que busca reforzar la mediacancha del equipo para desafíos futuros como el anhelado Mundial de Clubes.

Esta maniobra no solo rememora el pasado compartido entre Gago y Paredes en Boca durante 2013, sino que también sugiere una simbiosis perfecta entre un ídolo del club y una figura en ascenso del fútbol internacional dispuesto a volver a sus raíces. El entusiasmo de Paredes por regresar es evidente, habiendo expresado previamente su deseo de retirarse en Boca bajo la presidencia de Juan Román Riquelme, quien tiene una fuerte sintonía con la afición.

El retorno de Gago y la posible llegada de Paredes representan un renacimiento futbolístico en Boca, apelando a la identidad azul y oro que tanto caracteriza al club. Esta estrategia podría marcar una nueva era, fusionando experiencia y juventud bajo una conducción tecnificada. La historia y el porvenir del Xeneize están así entrelazados, prometiendo una sinfonía de logros que podría resurgir el ánimo no solo del equipo, sino de toda su hinchada.