Falleció Juan José Sebreli, el reconocido sociólogo y escritor argentino, a los 93 años.

El viernes pasado nos dejó a los 93 años Juan José Sebreli, un intelectual de peso en la Argentina, según informó Clarín. Sebreli estaba internado en el Hospital Italiano por una descompensación de la que no pudo recuperarse. El miércoles anterior todavía lo veíamos en la Biblioteca Nacional en la presentación de un libro, acompañado por Jorge Fernández Díaz y Marcelo Gioffré.

Una mente brillante de las primeras en abrazar el existencialismo en nuestro país, compartió camino con figuras como Carlos Correas y Oscar Masotta. En 2015, la Legislatura porteña lo distinguió como ciudadano ilustre por el impacto de su obra.

Sebreli no solo fue honrado con dos Premios Konex de Platino sino que también recibió la mención “Senador Domingo Faustino Sarmiento” en el Senado de la Nación, un reconocimiento a sus aportes a la letra y la reflexión.

Desde los ’60, su obra nos acompañó, con más de 30 libros y un montón de charlas académicas que dejaron huella. Su primer gran éxito, “Buenos Aires, vida cotidiana y alienación” en 1964, dio inicio a un nuevo capítulo de la sociología argentina.

Sebreli fue un tipo que decía las cosas sin vueltas. Nunca buscó refugio en puestos o favores del poder, como destacó Gioffré, su amigo de toda la vida. Flor de personaje que, distraído en lo cotidiano, era todo un genio en sus reflexiones abstractas.

Lo interesante de Sebreli es cómo manejaba su doble rol: intelectual y provocador. Su mirada estaba lejos del populismo y no se privó de criticar al peronismo y al kirchnerismo, temas que siempre lo inquietaron.

Nacido en Buenos Aires allá por 1930, sus comienzos se vinculan a revistas culturales como “Contorno”, una de las tantas trincheras desde donde arremetió con ideas frescas y poderosas, introduciendo nuevos enfoques filosóficos y culturales en Argentina.

En cuanto a su pensamiento, Sebreli buscaba una fusión entre la filosofía y la sociología, una mezcla que durante buena parte de su vida lo llevó a desarrollar ensayos siempre incisivos y provocadores.

Incluso, en cuestiones políticas se mantuvo como un “outsider”, creyendo en el compromiso del intelectual, pero nunca alineándose ciegamente con bandos o partidos. Siempre decía que un intelectual debe ser una voz crítica, sin ataduras.

Sobre el papel de los intelectuales en la actualidad, Sebreli sentía que la investigación periodística y el mundo académico ocupaban el lugar que antes tenían los intelectuales libres. Él destacaba la independencia como el motor que guio toda su vida.

No es ningún secreto que Sebreli tenía diferencias marcadas con el peronismo, criticando tanto sus raíces como sus derivaciones más recientes, opinión que plasmó en numerosos escritos y apariciones públicas.

A lo largo de su carrera, Sebreli ganó premios y recibió aplausos por sus trabajos críticos sobre temas y personajes icónicos de la realidad argentina. Sus reconocimientos, tanto nacionales como internacionales, avalan una trayectoria de pensamiento profundo y provocador.

Con libros de gran impacto, Sebreli dejó su huella en la reflexión sociopolítica del país. Su legado seguirá vigente en sus críticas y en su enfoque desafiante hacia los consensos establecidos.