Así arranca el 2025: ¿Quiénes le dieron la bienvenida primero y cómo lo celebran?

En un año cargado de conflictos y tensiones políticas, el mundo recibió el 2025 con celebraciones llenas de color y esperanza, desde Sídney hasta París, pasando por una Siria que empieza a vislumbrar cambios significativos tras el fin del gobierno de los Asad. Las ciudades iluminaron sus cielos con fuegos artificiales y espectáculos de luces, y millones de personas se reunieron en plazas icónicas alrededor del planeta.

La primera en dar la bienvenida al nuevo año fue la Isla Christmas en el Pacífico, seguida de cerca por Nueva Zelanda y Australia, con deslumbrantes festejos en Auckland y Sídney. La Sky Tower recibió 2025 con fuegos artificiales que dejaron a todos boquiabiertos. Mientras, en Sídney, más de un millón de personas disfrutaron del espectacular show sobre el famoso puente de la bahía.

Las celebraciones continuaron en distintas partes del mundo, cada lugar con su toque especial. En Bangkok, los shows en vivo querían atraer a las multitudes, mientras que en Yakarta, los drones se combinaron con los fuegos artificiales para dar un toque futurista. Sin embargo, no todo fue alegría: en Corea del Sur, las festividades sufrieron limitaciones por un trágico accidente aéreo reciente.

China y Rusia demostraron su cercanía política en saludos cruzados entre Xi Jinping y Vladimir Putin, subrayando su unidad frente a Occidente. Esta camaradería contrasta con los desafios globales, donde la guerra y las dificultades económicas pesaron sobre muchos países durante el 2024.

En Europa, el clima nublado amenazó las celebraciones en el Reino Unido, llevando a cancelaciones en Escocia. Por otro lado, en Alemania, el llamado a la unidad de Scholz resonó ante los desafíos que enfrenta la nación. En Italia, el Año Santo del Papa Francisco comenzó con una promesa de paz, mientras que París se preparó para grandes congregaciones en los Campos Elíseos.

Brasil y Estados Unidos tampoco se quedaron atrás, con Río de Janeiro celebrando en pleno Copacabana y Nueva York recibiendo 2025 bajo la brillante bola de Times Square.

Conclusión independiente: Las festividades globales de Año Nuevo no solo reflejan la diversidad de culturas y tradiciones alrededor del mundo, sino también una resiliencia compartida. A pesar de los desafíos y las tensiones políticas, las personas encontraron momentos para reunirse y celebrar la esperanza y la unidad de un futuro más prometedor. Cada celebración lleva un mensaje de deseo colectivo por la paz, el entendimiento y el progreso.