Nuevas medidas para aliviar impuestos en CABA: ABL, alquileres y propiedades

El martes, Jorge Macri, jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, decidió dar un soplo de aire fresco a muchos porteños al anunciar varios beneficios impositivos. Esta medida tiene el objetivo de aliviar el peso de los impuestos en la Ciudad, reduciendo colectivamente $305 millones en cargas fiscales.

Dentro de este paquete, se destacan varias acciones como la exención del ABL para jubilados y pensionados. Además, hay una alícuota del 0% para ciertos contratos y transacciones comerciales.

Actualmente, de los 600,000 jubilados y pensionados en la ciudad, unos 78,678 disfrutan de exenciones parciales o totales del impuesto al Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL). Sin embargo, gracias a una nueva ley aprobada recientemente, más beneficiarios podrán disfrutar de estas exenciones gracias a una actualización en los criterios.

Ahora, el valor fiscal del inmueble no debe exceder los $40,000,000 en lugar de los anteriores $75,000. También se ha establecido que aquellas personas que perciban hasta cuatro veces la jubilación mínima, es decir, alrededor de $1,063,000, podrán acceder a la exención.

Anteriormente, el grado de exención del ABL variaba entre el 25% y el 100%, dependiendo del valor del inmueble. Con los nuevos cambios, aquellos que cumplan con las condiciones recibirán automáticamente la exención total del impuesto.

Otro aspecto importante de estas medidas es la alícuota del 0% en contratos de alquiler con fines comerciales e incluso para alquileres temporarios con fines turísticos. Esto implica que estas transacciones quedan libres de pagar el 0.50% que antes se aplicaba, representando un alivio económico tanto para propietarios como para inquilinos.

A partir del 1° de enero del 2025, el monto exento del Impuesto de Sellos para la compraventa de inmuebles de vivienda única se incrementa significativamente: de $56,270,730 a $205,332,000 (alrededor de US$200,000). Esto significa que aquellos que compren propiedades bajo este techo no pagarán el impuesto del 3.5%, ofreciéndoles un alivio financiero y alentando el sueño de la casa propia.

Generalmente, este impuesto se solía dividir entre el comprador y el vendedor al 1.75% cada uno, pero ahora se reduce notablemente.

En un esfuerzo por impulsar el crecimiento del sur de la Ciudad, el gobierno porteño también ha reducido el Impuesto de Sellos del 3.5% al 0.5% en Barracas, en un área delimitada por varias calles clave. Esta zona, históricamente menos desarrollada, verá beneficios en su desarrollo inmobiliario, fomentando la construcción de nuevas viviendas.

Estas medidas buscan aliviar las cargas fiscales de los más vulnerables y fomentar el desarrollo económico a través de incentivos fiscales. Dichas políticas podrían activar tanto el mercado inmobiliario como automotriz, contribuyendo al equilibrio de desarrollo en las diversas áreas de la Ciudad.

LA NACION