Todo sobre Marco Rubio: el experto en política que se opuso a Trump y ahora será su secretario de Estado
Publicado: 14 / 11 /2024WASHINGTON.- Donald Trump tiene en mente nombrar como secretario de Estado al senador Marco Rubio, un hijo de inmigrantes cubanos, que va a convertirse en el primer latino en liderar la diplomacia de Estados Unidos. Rubio ha dicho que el presidente argentino Javier Milei es un aliado de Estados Unidos y que Washington debería apoyarlo. Además, tiene posturas firmes contra las dictaduras en Cuba, Venezuela y Nicaragua, y está preocupadísimo por la amenaza de Rusia, Irán y China.
Varios medios de Estados Unidos, como The New York Times y Politico, mencionaron anoche que Trump va a elegir a Rubio para el puesto más importante del gabinete –el secretario de Estado está cuarto en la línea de sucesión– y va a ser clave en las relaciones internacionales del próximo gobierno de Trump. Amigos y colegas de Rubio, como el senador Rick Scott y la congresista María Elvira Salazar, ya lo felicitaron en las redes sociales.
“Milei es un aliado de Estados Unidos, deberíamos apoyarlo”, dijo Rubio en LA NACION en diciembre de 2023, el día en que Milei asumió como presidente.
Rubio ha sido un defensor muy crítico del kirchnerismo en Washington. Poco después de que Milei asumiera, Rubio envió una carta al presidente Joe Biden pidiendo sanciones contra Cristina Kirchner, a quien calificó como “una cleptócrata convicta que robó millones del Estado” y la responsabilizó de la crisis económica en Argentina. También ha estado especialmente atento a la investigación sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman.
El avance de Rubio, un ex aspirante a la presidencia en 2016, marca una alianza con Trump que hace unos años era impensable. Rubio fue uno de los críticos más acérrimos de Trump, incluso se enfrentaron en una pelea intensa durante las primarias de 2015 que incluyó una discusión insólita sobre el tamaño de las manos de Trump. Trump llegó a decir que Rubio “es un peso ligero” y Rubio lo llamó “un estafador”.
Pero en esta campaña, los dos se mostraron como aliados cercanos. Incluso Rubio estuvo en la “lista corta” de posibles candidatos para acompañar a Trump, aunque finalmente Trump eligió a J.D. Vance.
Rubio es considerado un “halcón” por su enfoque duro en temas de política exterior, contra dictaduras en Cuba, Nicaragua y Venezuela. Ha respaldado a Israel y Ucrania, y está atento a Irán, China y Rusia, que ve como amenazas para Estados Unidos y el mundo.
Ha sido crítico de gobiernos de izquierda en América Latina, como los de México, Colombia y Brasil, por “dar cabida a dictaduras regionales”, según escribió en LA NACION, también ha dicho que han “abierto la puerta a amenazas como China, Rusia e Irán, que ha financiado ataques terroristas contra civiles en Israel”. En el primer gobierno de Trump, se decía que Rubio era un “Secretario de Estado en las sombras” para América Latina.
Rubio nació en 1971 en Miami, Florida, hijo de inmigrantes cubanos que buscaron el sueño americano. Trabajó en varios oficios antes de llegar al Senado en 2010, cuando los republicanos arrasaron con el impulso del Tea Party.
En 2012, en la convención republicana al nominar a Mitt Romney Rubio adquirió fama nacional. En su discurso se refirió a un consejo de su padre, que luego repitió en 2015 al lanzar su candidatura presidencial. “En este país, ustedes van a poder lograr todas las cosas que nosotros no pudimos”, les decía su padre.
Entró a la campaña de 2015 como favorito pero se encontró con el ascenso de Trump. La competencia fue tan fuerte que ambos terminaron peleando sobre el tamaño de sus manos. Trump llamaba a Rubio “Pequeño Marco” y Rubio hizo un comentario irónico sobre sus manos, lo que llevó a Trump a responder en un debate. “Les garantizo que no hay ningún problema”, dijo sobre ese tema.
Rubio lamentó después el nivel del debate en esas primarias, y con el tiempo se alineó con Trump, como gran parte de su partido.
Rubio tiene experiencia en política internacional. Su nombramiento fue bien recibido por ser una figura conocida en Washington y alguien que ha intentado unir al trumpismo con las estructuras más tradicionales del partido republicano. Es miembro de varios comités importantes en el Senado, destacándose en relaciones exteriores e inteligencia.
“Aunque las guerras en Ucrania y Medio Oriente y la competencia global con China ocuparán la mayor parte de su atención, América Latina no será relegada”, dijo Michael Shifter, académico de Georgetown University, a LA NACION.
Su nueva posición de primer diplomático requerirá un ajuste, dado que tendrá que adaptarse a la personalidad variable de Trump y su tendencia a acercarse a mandatarios autoritarios, algo que Rubio ha criticado en el pasado.
Rubio enfrentará desafíos importantes, especialmente en Ucrania. Desde el Senado ha respaldado a Volodimir Zelensky, pero Trump ha prometido terminar el conflicto con una negociación. Rubio señaló recientemente que había que buscar una solución razonable para Ucrania, destacando que Estados Unidos está financiando una guerra estancada.
“Los ucranianos han sido muy valientes y fuertes contra Rusia, pero estamos ante una guerra de estancamiento que hay que resolver”, dijo Rubio hace poco.